Esta devoción forma parte del Devoción de Adviento del Árbol de Jesse serie.
Lectura de la Escritura: Isaías 11:6-9
Qué escena¡! Los lobos se pasean junto a los corderos. Los leopardos duermen la siesta junto a las cabritas. Un desfile de terneros y osos es dirigido por un niño de ojos brillantes, que se detiene para invitar a una serpiente a unirse a la diversión.
La escena tiene un carácter fantástico y circense, tan juguetón como tonto. Prácticamente se puede escuchar el honky-tonk de fondo. ¿Es una broma? Es tan inverosímil que bien podría serlo.
¿Cuándo, en este mundo de perros, un lobo se contendría lo suficiente como para no desgarrar a un rollizo corderito? ¿Cuándo se atrevería una madre a dejar que su hijo luchara con un cachorro de oso? ¿Cuándo una serpiente venenosa lamerá la mano de un bebé como lo haría un cachorro?
En este mundo, probablemente nunca. Ni el más optimista de nosotros esperaría que un cordero sobreviviera en un pasto con un lobo. Pero en el mundo venidero, el mundo que está justo al borde del horizonte, este desfile improbable será la forma de las cosas. En el mundo donde reina el Señor, toda esta improbabilidad se convierte no sólo en probable, sino en real. La escena de Isaías no es una fábula. Esto es lo que tenemos que esperar.
Oración
Qué ganas tengo de un mundo en el que depredador y presa jueguen juntos. Que venga tu reino, llenando la tierra con tu conocimiento. Amén.
Grace Claus es la coordinadora del ministerio infantil de una iglesia en el área de Seattle, donde vive con su familia. Tiene un MDiv del Seminario Teológico de Western en Holland, Michigan.
