Esta devoción forma parte del Devoción de Adviento del Árbol de Jesse serie.
Lectura de la Escritura: Mateo 3:1-6
Una voz solitaria es arrastrada por los siglos por un viento seco del desierto: Prepara el camino del Señor, endereza sus senderos.
La voz profetizada por Isaías se hace más fuerte, más clara. Su fuente se hace visible. Es Juan el Bautista, que llama al pueblo de Israel. Los años de espera hicieron que el pueblo casi olvidara la promesa de Dios de enviar un Salvador, alguien que redujera al pueblo de sus vidas de miseria, pecado y opresión. Pero Juan el Bautista está aquí para refrescarles la memoria. Puede que lo hayan olvidado, pero Dios no. Un Salvador está en camino.
Juan el Bautista prepara el camino para la llegada de Jesucristo. Invita al pueblo a bautizarse para preparar la llegada de Jesús. La gente confiesa sus pecados y queda limpia.
Al igual que Juan y las personas que bautiza, podemos prepararnos para la venida de Cristo. Podemos confesar y arrepentirnos de nuestros pecados. Podemos pedirle a Dios que nos haga limpios, aptos para estar en la presencia de nuestro Salvador.
Oración
Señor, ¿podrías señalarme los lugares en los que soy un desastre? ¿Los lugares que me dificultan el encuentro contigo? Te confieso esos pecados. Hazme limpio. Prepara mi corazón para recibirte. Amén.
Grace Claus es la coordinadora del ministerio infantil de una iglesia en el área de Seattle, donde vive con su familia. Tiene un MDiv del Seminario Teológico de Western en Holland, Michigan.