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Esta devoción forma parte del Devoción de Adviento del Árbol de Jesse serie. 

Lectura de la Escritura: Génesis 1:26-31

En la historia de la creación de los dos primeros seres humanos, el elenco de personajes es en realidad más amplio de lo que parece a primera vista. Por supuesto, están los dos humanos y Dios, el creador. También está el Espíritu, que planea sobre la escena. Y está la segunda persona de la Trinidad, el Verbo que estaba con Dios en el principio, por el que fueron creadas todas las cosas (Juan 1). Esa persona, Jesucristo, puede no estar presente en su carne humana todavía, pero ciertamente forma parte de esta escena.

Mientras Dios se acuclilla en el polvo, reuniéndolo en forma de hombre, tiene en mente a otro humano: Jesucristo. Aunque Jesús aún no ha nacido en el mundo, cuando lo haga, definirá a la humanidad para siempre. Él es el primero-alfa-y el último-omega (Apocalipsis 1:8).

Así que cuando Dios crea a ese hombre y a esa mujer en el Génesis, formándolos a su imagen, en realidad los está formando a la imagen de Jesucristo, que es la imagen de Dios (Colosenses 1:15). Si los seres humanos somos la imagen de Dios, Cristo es la imagen de Dios.

Ten esto en cuenta la próxima vez que oigas que es nuestra capacidad de razonar, de crear cosas o de relacionarnos con otras personas: que es la imagen de Dios en nosotros. Puede ser eso. O puede ser simplemente Jesucristo, el humano perfecto, el que está ahí desde el principio, el que siempre intercede por nosotros (Romanos 8:34). Si nos preocupa que la imagen de Dios se haya oscurecido en nosotros, podemos confiar en que, a través de Cristo, brilla intensamente.

Oración

Jesús, te agradezco que seas la imagen de Dios, y que seas el verdadero humano. Y te agradezco que, a través del Espíritu Santo, estoy unido a ti. Te pido que me formes para parecerme más y más a ti cada día. Amén.

Grace Ruiter cofundó Faithward y supervisó su crecimiento desde un pequeño blog hasta un ministerio que llega a más de 100.000-200.000 personas cada mes. Lleva haciendo demasiadas preguntas desde que empezó a hablar, y ahora no piensa parar. Aunque su curiosidad ha desafiado su fe a veces, también es la forma en que su relación con Dios ha crecido hasta donde está hoy. Puedes ponerte en contacto con Grace en graceruiterwrites@gmail.com.