¿Quién es Dios?
"¿Quién es Dios?" Es una pregunta que la gente se ha hecho a lo largo de la historia y en todas las culturas. Aunque todavía hay muchas cosas que no sabemos sobre Dios, aquí hay algunas cosas que sí sabemos sobre la naturaleza y el carácter de Dios.
Dios es nuestro creador
Aquí es donde comienza la historia. Leemos en el Génesis, el primer libro de la Biblia, que Dios creó todo: la luz, la tierra, el agua, el aire, las plantas, los animales y los seres humanos. Dios creó el mundo entero de la nada, y todo lo que creó, Dios lo llamó "bueno". Dios guardó lo mejor para el último día de la creación; creó al hombre y a la mujer a su imagen y semejanza.
En el principio, todos y todo fueron creados buenos. Todo fue creado para reflejar la gloria de Dios. Esto no ha cambiado. Toda la creación sigue estando destinada a reflejar la gloria de Dios.
Dios es tres en uno, una Trinidad.
¿Cuál es exactamente la relación entre Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo?
Definir la Trinidad no es fácil. A veces se explica la Trinidad como un triángulo: tres puntos distintos, pero una sola figura. Otra explicación se encuentra en el Confesión belgaArtículo 8. La confesión dice que Dios, que es un solo ser en esencia, existe eternamente en tres personas.
Dios es inmutable.
Vivimos en un mundo en el que todo cambia, y en el que el ritmo del cambio parece acelerarse continuamente. Esto provoca mucho estrés y ansiedad, ya que la gente trata de mantener una sensación de estabilidad en medio de todo el cambio.
Por eso es tan importante la verdad de que Dios es el mismo ayer, hoy y siempre. Es nuestra ancla y nuestra esperanza en un mundo en el que la vida puede ser incierta e imprevisible. Es la base firme sobre la que podemos apoyarnos cuando las cosas parecen derrumbarse a nuestro alrededor.
Dios es amor.
Por encima de todo, Dios es amor. Esta verdad queda clara a lo largo de toda la Biblia por las acciones de Dios, incluyendo el envío de Jesús, el único hijo de Dios, a la tierra para vivir y morir, abriendo la puerta para que nos reconciliemos con Dios.
Dios es fiel.
La Biblia está llena de promesas de Dios: para los individuos, para la antigua nación de Israel y para nosotros. Muchas veces, el Antiguo Testamento cuenta cómo el pueblo de Dios se apartó y buscó otros dioses o deseos. A pesar de todo, Dios permaneció fiel, sacándolos de su adoración a falsos dioses y recordándoles el amor y la fidelidad de Dios.
Lo mismo ocurre con nosotros hoy. Incluso cuando no somos fieles a nuestras promesas a Dios, Dios es siempre fiel a nosotros. Dios nunca nos abandonará ni dejará de amarnos, aunque cometamos errores.
Dios es conocible.
Dios no está alejado ni oculto de nosotros, sino que quiere que le conozcamos personalmente. Podemos conocer a Dios leyendo y estudiando la Biblia, las Sagradas Escrituras.
La Biblia es la historia del Dios que creó el universo, que hizo todo lo que hay en él y declaró que era bueno. Es la historia de un Dios que desea tener una relación profunda con nosotros. Es la historia de un Dios que ha estado cambiando y guiando la vida de las personas durante miles de años.
Dios es más grande que todo esto.
Aunque podemos llegar a conocer a Dios a través de la lectura de la Biblia, el seguimiento de Jesucristo y la escucha del Espíritu Santo, no podemos encerrar a Dios ni ponerlo en una caja. Incluso cuando ocurren cosas que no podemos entender o explicar, seguimos confiando en el propósito redentor de Dios en todas las cosas, confiando en que Dios es bueno, en que Dios nos ama y en que nuestra salvación eterna llega a través de la gracia de Dios.