I ue necesario comprar un montón de desayunos para llegar a donde está hoy la Trinity Community Church. Al menos así es como Bill Flavin, pastor de Trinity, describe su proceso de construcción de relaciones con la comunidad de Brown Deer, Wisconsin. Al principio de su mandato como pastor, Flavin empezó a invitar a desayunar a los líderes de la comunidad para conocerlos y crear confianza entre Trinity y la ciudad.
"Se trataba de sentarse a la mesa, presentarse y preguntar un poco sobre su organización", dice Flavin. "La visión que lanzamos desde el principio fue que no queremos hacer sólo cosas de moda. Queremos hacer cosas que beneficien a toda la comunidad".
Incluso con esta visión orientada hacia el exterior, Flavin tuvo que comer mucho para construir esa confianza. Como descubrió en sus conversaciones con los líderes de la ciudad, los experimentados funcionarios del gobierno de Brown Deer ya habían escuchado la propuesta de Flavin por parte de otras iglesias y, en última instancia, esas iglesias no la cumplieron. Esas experiencias previas hicieron que los funcionarios se mostraran reticentes a la hora de involucrar a otra iglesia en una asociación para la construcción de la comunidad.
Sin embargo, Flavin y la comunidad de Trinity adoptaron un enfoque diferente. Por un lado, estaban los desayunos para establecer relaciones. También estaba el compromiso de Flavin de ser un vecino y un líder dentro de la ciudad. Después de coordinar con éxito el evento de iluminación del árbol de Navidad de la ciudad, los líderes de la comunidad pudieron ver que no estaba "haciendo esto sólo para sí mismo o para la iglesia", como él dice.
Con el tiempo, Trinity desarrolló relaciones mutuas con varias organizaciones de la ciudad. La iglesia encabeza una fiesta comunitaria anual y otros eventos locales en los que la congregación conoce nuevas organizaciones comunitarias y profundiza en las relaciones con otras. Para Flavin y la congregación de Trinity, su compromiso de "que los vecinos conozcan a sus vecinos" proviene de la convicción de que "vivir plenamente el diseño que Dios nos ha dado es vivir una vida misionera", dice. Y la ciudad se ha dado cuenta.
"Es difícil poner en palabras lo mucho que aprecio el liderazgo del Pastor Flavin cuando se trata de los esfuerzos de alcance comunitario de la iglesia y la voluntad de trabajar con el gobierno del pueblo", dice Michael Kass, jefe de policía de Brown Deer. "Creo que su liderazgo dentro de la iglesia es instrumental en la participación de la iglesia y el alto nivel de voluntariado que experimentamos en el pueblo de Brown Deer".
Ahora Flavin forma parte de las reuniones periódicas de los líderes de la comunidad; la iglesia, el distrito escolar local, el departamento de salud y otras organizaciones locales se reúnen mensualmente para discutir las necesidades y oportunidades de la comunidad. Fue allí donde Flavin sacó a relucir una oportunidad de Trinity: los adultos de la iglesia estaban considerando un nuevo campamento deportivo de verano para niños y querían que el campamento estuviera disponible para los niños de todo Brown Deer. Si el campamento iba a ser para la comunidad, debía estar en la comunidad, pensaron. La iglesia se preguntaba si podría acoger el campamento en un lugar de la comunidad local.
"Lo sorprendente fue que, al final de la reunión, teníamos ofertas en fila para todo tipo de cosas", dice Flavin. "Nos dijeron: 'Podéis tener este parque y este otro, y podéis tener esta escuela'. Así que, literalmente, teníamos una gran cantidad de opciones".
El campo de la escuela secundaria local se convirtió en la sede del campamento deportivo. En cuanto al equipamiento, Trinity pidió ayuda a otra asociación local.
"Acabamos de llamar a la YMCA, con la que hemos trabajado en varios eventos, y les dijimos: 'Oye, ¿puedes ayudarnos?'", dice Flavin. "Y ellos dijeron: 'No es gran cosa, recójanlos la semana que viene, aquí hay veinte bates, veinte cascos'. Y nosotros, como iglesia, lo celebramos de verdad. Hay una sensación de asombro por el hecho de que Dios haga eso, pero también de decir -casi en el buen sentido- 'Por supuesto que sucedió, porque estas son las relaciones que tenemos'".
Trinity acogió el campamento deportivo durante la última semana de junio. Casi 60 niños de Trinity y de la comunidad asistieron para jugar al béisbol, al baloncesto y al fútbol, y para aprender sobre la perseverancia y la fe a partir de la historia de Nehemías. Casi el mismo número de adultos de la congregación de 90 personas de Trinity se ofrecieron como voluntarios para realizar el campamento.
Muchos de los actuales miembros adultos de la iglesia llegaron a Trinity porque se dieron cuenta del compromiso de la iglesia con el pueblo de Brown Deer a través de eventos como éste. Pero para Flavin, la historia va más allá de la búsqueda de nuevos miembros.
"Estamos haciendo esto porque Dios puso nuestra iglesia en esta comunidad, en este lugar específico, en este momento, para hacer de Brown Deer un lugar mejor", dijo. "Si en el camino de hacer eso Dios en su gran sentido del humor trae a la gente a nuestra iglesia porque quieren ser parte de eso, perfecto. Están exactamente donde tienen que estar. Pero no estamos haciendo campamentos deportivos e iluminación de árboles como un plan de crecimiento de la iglesia. Lo estamos haciendo porque creemos que esto va a bendecir a nuestra comunidad, y el resto está en sus manos".
Natalia Connelly
Natalia Connelly es estudiante del Seminario Teológico de Western y capellán residente en los Servicios Cristianos de Salud Mental de Pine Rest en Grand Rapids, Michigan.
